Fue el 1 de diciembre de 1914, en Bolonia, cuando los hermanos Maserati fundaron la empresa, una marca destinada a pasar a la historia del automóvil. Inicialmente el negocio de Maserati era un taller que funcionaba en Bolonia, en el N° 1 Via de’ Pepoli; los hermanos Maserati comenzaron trabajando en sus propios diseños de coches desde el estallido de la Primera Guerra Mundial.
Durante los años veinte y treinta el garaje Maserati continuó haciendo coches de competición para vender en todo el mundo, pero también produciendo vehículos de carretera con toda la elegancia que distingue a la marca, combinada con un rendimiento deportivo derivado de los circuitos. En 1937, cuando la familia Orsi se hace cargo de la gestión de la empresa, Maserati se traslada desde su sede original de Bolonia a la localidad de Módena, a Viale Ciro Menotti, donde algunos de los deportivos y GT claves de la marca se diseñan y fabrican todavía hoy.